crisis de la humanidad europea (identidad espiritual que va
más allá de la Europa geográfica, hasta América, por ejemplo) y que nació con
la antigua filosofía griega. Esta filosofía comprendió el mundo como un
interrogante que debía ser resuelto porque la "pasión por el conocimiento
se había adueñado del hombre".
se preguntaba si Europa se encontraba aún en condiciones de
sobrevivir a la misma.
las ciencias europeas que habían reducido el mundo a un
simple objeto de exploración técnica y matemática. Cuanto más avanzaba éste en
su conocimiento, más perdía de vista el conjunto del mundo y a sí mismo,
hundiéndose "el olvido del ser".
Ensalzado antaño por Descartes como "dueño y señor de
la naturaleza", el hombre se convirtió en una simple cosa en manos de
fuerzas que le exceden, le sobrepasan, le poseen su "mundo de la
vida" no tiene ya valor ni interés algunos
esta época que es degradación y progreso a la vez
si es cierto que la filosofía y las ciencias han olvidado el
ser del hombre, aún más evidente resulta que con Cervantes se ha creado un gran
arte europeo que no es otra cosa que la exploración de este ser olvidado.
con los contemporáneos de Cervantes se pregunta qué es la
aventura; con Samuel Richardson comienza a examinar "lo que sucede en el
interior", a desvelar la vida secreta de los sentimientos con Tolstoi se
acerca a la intervención de lo irracional en las decisiones y comportamiento
humanos. La novela sondea el tiempo
La novela acompaña constante y fielmente al hombre desde el
comienzo de la Edad Moderna. La "pasión de conocer" se ha adueñado de
ella para que escudriñe la vida concreta del hombre y la proteja contra
"el olvido del ser"
El conocimiento es la única moral de la novela
Cuando Dios abandonaba lentamente el lugar desde donde había
dirigido el universo, don Quijote salió de su casa y ya no estuvo en
condiciones de reconocer el mundo. la única Verdad divina se descompuso en
cientos de verdades relativas que los hombres se repartieron. De este modo
nació el mundo de la Edad Moderna y con él la novela, su imagen y modelo.
ego pensante como el fundamento de todo, estar de este modo
solo frente al universo
Comprender con Cervantes el mundo como ambigüedad, tener que
afrontar un montón de verdades relativas que se contradicen (verdades
incorporadas a los egos imaginarios llamados personajes)
El hombre desea un mundo en el cual sea posible distinguir
con claridad el bien del mal. En este deseo se han fundado religiones e
ideologías.
incapacidad de soportar la relatividad esencial de las cosas
humanas, la incapacidad de hacer frente a la ausencia de Juez supremo. Debido a
esta incapacidad, la sabiduría de la novela (la sabiduría de la incertidumbre)
es difícil de aceptar y comprender.
Don Quijote partió hacia un mundo que se abría ampliamente
ante él. Podía entrar libremente en él y regresar a casa cuando fuera su deseo.
Las primeras novelas europeas son viajes por el mundo, que parece ilimitado.
En el aburrimiento de la cotidianeidad, los sueños y
ensoñaciones adquieren importancia. El infinito perdido del mundo exterior es
reemplazado por lo infinito del alma. La gran ilusión de la unicidad
irreemplazable del individuo, una de las más bellas ilusiones europeas, se
desvanece.
Pero el sueño sobre lo infinito del alma pierde su magia en
el momento en que la Historia se apodera del hombre.
Lo infinito del alma, si lo tiene, pasó a ser un apéndice
casi inútil del hombre.
El camino de la novela se dibuja como una historia paralela
de la Edad Moderna.
¿Qué ha ocurrido con la guerra y sus horrores para que se
hayan convertido en motivo de risa? ¿Cuál es entonces el motor de una guerra?
La unidad de la humanidad signifìca: nadie puede escapar a
ninguna parte.
estas novelas ya no prolongan la conquista del ser. No ponen
al descubierto ninguna nueva parcela de la existencia; únicamente confirman lo
que ya se ha dicho; más aún: en la confirmación de lo ya dicho
La llamada del juego
novelas concebidas como un juego grandioso. La novela posterior se dejó
aprisionar por el imperativo de la verosimilitud, por el decorado realista, por
el rigor de la cronología.
La llamada del sueño
fusión del sueño y la realidad antigua ambición estética de la novela. demuestra
que la novela es el lugar en el cual la imaginación puede explotar como en un
sueño y que la novela puede liberarse del imperativo aparentemente ineluctable
de la verosimilitud.
La llamada del
pensamiento hacer de la novela la suprema síntesis intelectual.
La llamada del tiempo.
incita al novelista a no limitar la cuestión del tiempo a la memoria personal,
sino a ampliarla al enigma del tiempo colectivo, para captar su propia
historia.
si la novela debe realmente desaparecer, no es porque esté
completamente agotada, sino porque se encuentra en un mundo que ya no es el
suyo.
La unificación de la historia del planeta, ese sueño
humanista que Dios con maldad ha permitido que se llevara a cabo, va acompañada
de un vertiginoso proceso de reducción
la vida del hombre se reduce a su función social; la vida
social se reduce a la lucha política y ésta a la confrontación de dos únicas
grandes potencias planetarias.
el "mundo de la vida" se oscurece fatalmente y en
el cual el ser cae en el olvido.
Por tanto, si la razón de ser de la novela es la de mantener
el "mundo de la vida" permanentemente iluminado y la de protegernos
contra "el olvido del ser", ¿la existencia de la novela no es hoy más
necesaria que nunca?
La novela (como toda la cultura) se encuentra cada vez más
en manos de los medios de comunicación (agentes de la unificación de la
historia planetaria, amplían y canalizan el proceso de reducción; distribuyen
en el mundo entero las mismas simplificaciones y clichés que pueden ser aceptados
por la mayoría, por todos, por la humanidad entera)
todos tienen la misma visión de la vida; que se refleja en
el mismo orden según el cual se compone su sumario, en las mismas secciones,
las mismas formas periodísticas, en el mismo vocabulario y el mismo estilo, en
los mismos gustos artísticos y en la misma jerarquía de lo que consideran
importante y lo que juzgan insignificante
Este espíritu común de los medios de comunicación contrario
al espíritu de la novela
El espíritu de la novela es el espíritu de la complejidad.
Cada novela dice al lector: "Las cosas son más complicadas de lo que tú
crees". Esa es la verdad eterna de la novela
Para el espíritu de nuestro tiempo parece molesta e inútil
la vieja sabiduría de Cervantes que nos habla de la dificultad de saber y de la
inasible verdad.
la novela ya no es obra sino un hecho de actualidad como
tantos otros, un gesto sin futuro.
la novela ya no puede vivir en paz con el espíritu de
nuestro tiempo
Pero, si el porvenir no representa un valor para mí, ¿a
quién o a qué me siento ligado? no me siento ligado a nada salvo a la
desprestigiada herencia de Cervantes.
gracias
ResponderEliminarde nada :)
EliminarOye será que me pueden ayudar con esta pregunta sobre esta obra
ResponderEliminar¿a que llama hermann broch la moral de la novela?